La autopista está bloqueada por camiones que la atraviesan perpendicularmente. Incontables coches se mantienen parados, acogiendo a sus conductores, en los carriles. El Batmóvil avanza por el arcén hasta que le resulta imposible seguir. Batman toca el estridente claxon y hace señas a uno que parece llevar la voz cantante. Cuando se acerca Batman le dice:
- Déjenme seguir. Debo luchar con un supervillano.
- Nadie pasa,- le dice el hombre. - De los supervillanos hoy nos ocupamos nosotros.
Si vienes sin mucho tiempo, permíteme que te recomiende:
Ni tanto y Autobiografías Son los que más me gustan.
Además hay una pequeña serie que me entretiene bastante: Relatos del General
Por último, te invito a seguir el juego, si quieres como un comentario, si quieres en otro lugar: Despertares
Varias personas me han comentado que sus preferidos son:
Ultimas voluntades y Personajes Históricos V que, por cierto, a medida que me alejo de éste último me va gustando más.
Y si has llegado hasta aquí buscando nanorrelatos sólo porque el nombre del blog es NANORRELATOS, te dejo aquí algunos reunidos: Nanorrelatos
Ni tanto y Autobiografías Son los que más me gustan.
Además hay una pequeña serie que me entretiene bastante: Relatos del General
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Varias personas me han comentado que sus preferidos son:
Ultimas voluntades y Personajes Históricos V que, por cierto, a medida que me alejo de éste último me va gustando más.
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martes, 28 de septiembre de 2010
viernes, 24 de septiembre de 2010
El grito, el anhelo
El general terminó su discurso de guerra y muerte. Un soldado a su lado gritó sin mucho ánimo:
-¡Arriba el general!
Y todos los demás gritaron también:
- ¡Arriba!
Y los pies del general se despegaron diez centímetros del suelo. Cuando el soldado lo vió decidió probar otra vez:
-¡Arriba el general!
Y de nuevo los demás respondieron:
-¡Arriba!
Los pies del general se despegaron otros diez centímetros.
Las tropas continuaron gritando hasta que lo perdieron de vista.
-¡Arriba el general!
Y todos los demás gritaron también:
- ¡Arriba!
Y los pies del general se despegaron diez centímetros del suelo. Cuando el soldado lo vió decidió probar otra vez:
-¡Arriba el general!
Y de nuevo los demás respondieron:
-¡Arriba!
Los pies del general se despegaron otros diez centímetros.
Las tropas continuaron gritando hasta que lo perdieron de vista.
jueves, 23 de septiembre de 2010
Promiscuidad
Quizá no tengamos los mismos objetivos ni parecidos intereses. Quizá no nos queramos ni tan siquiera nos caigamos bien. Es posible, incluso, que lo pasemos mal al estar juntos. Es su amnesia lo que le convierte en mi pareja perfecta.
martes, 21 de septiembre de 2010
Canción afgana
Hace unos días recibí un correo electrónico de mi amigo W.M. en el que me enviaba traducidas unas páginas del libro de Raimond Orwell "Afganistan: crying prayer", publicado recientemente por la editorial Recent Days Ltd. El propio texto invita a la reflexión antropológica, que tanto me interesa, sobre el origen de las leyendas. Dice así:
miércoles, 15 de septiembre de 2010
Despertares V
La luz entra por la ventana y Adam Smith despierta. Todo se va con el sueño: división de trabajo y mercado, comercio y riqueza, fisiocracia, beneficio y capital. La explotación. También Karl Marx.
lunes, 13 de septiembre de 2010
domingo, 12 de septiembre de 2010
Autobiografías
Todos conocíamos sus historias en el psiquiátrico. Y digo sus historias porque repetía una y otra vez, como un disco sin fin, el relato de sus vidas pasadas. Siempre en el mismo orden cronológico, a un oyente al que seguía con la mirada pero invisible para todos los demás.
"En mi primera vida me llamé Cayo Mario, ingresé en el ejército como legionario en cuanto cumplí los dieciséis años, participé en varias batallas en las provincias de Oriente. Gané prestigio junto a Cneo Pompeyo en sus incursiones en las tierras de sirios y salvé su vida poco antes de la deposición de Antíoco Asiático.
"En mi primera vida me llamé Cayo Mario, ingresé en el ejército como legionario en cuanto cumplí los dieciséis años, participé en varias batallas en las provincias de Oriente. Gané prestigio junto a Cneo Pompeyo en sus incursiones en las tierras de sirios y salvé su vida poco antes de la deposición de Antíoco Asiático.
martes, 7 de septiembre de 2010
Despertares IV
La luz entra por la ventana y Ernesto Guevara despierta. Todo se va con el sueño: la barba y la gorra con estrella, Cuba y Bolivia, la motocicleta, la revolución y la utopía. Alberto Korda. También el Ché.
lunes, 6 de septiembre de 2010
jueves, 2 de septiembre de 2010
Nepotismo
El director de la academia de Bellas Artes de Viena comentó al resto del jurado:
¿Qué importa que ese tal Hitler dibuje mejor?, ¿qué importa si hizo mejor prueba? Quien debe acceder a la academia no es ese joven pordiosero, si no el sobrino de este señor tan importante...
¿Qué importa que ese tal Hitler dibuje mejor?, ¿qué importa si hizo mejor prueba? Quien debe acceder a la academia no es ese joven pordiosero, si no el sobrino de este señor tan importante...
miércoles, 1 de septiembre de 2010
La novela
Sentado en mi butaca, en ésta de imitación de piel, mullida y hecha a mi espalda, trato de acabar la novela que se me resiste. Un clásico, dicen, que lleva en mis manos casi dos meses. Una gran novela, también dicen, que no ha conseguido enredarme en la trama. Por exceso de trabajo, por un par de viajes, por el calor que me distrae, por mil causas, pero también porque algo tiene la historia que no me atrapa y que deja que me adormezca después del trabajo, que salga de viaje sin ella y que el calor me distraiga. Sesenta páginas quedan apenas, que leeré antes de que acabe el día, si algo no ocurre. Determinación, le llamo a eso.
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